Un agente de policial le preguntó al chico si había ingerido alcohol y él respondió que sí.
La Policía de la Ciudad de Buenos Aires, detuvo a un adolescente de 18 años que provocó un accidente múltiple en Palermo. El autor del choque no dudó y escapó sin brindar asistencia, pero sus padres lo terminaron entregando ante los efectivos de seguridad que se acercaron a la zona.
El hecho sucedió en la avenida Del Libertador y Sinclair. Allí, personal de Tránsito estaba realizando controles de alcoholemia. En ese momento, el joven de 18 años que manejaba una camioneta Dodge RAM colisionó con otro vehículo frente al operativo.
Luego del impacto, el auto que estaba estacionado chocó contra una camioneta escolar que estaba parada y sin pasajeros a bordo. Aún así, la camioneta manejada por el joven continuó durante una cuadra. Allí, el conductor bajó e ingresó corriendo a su casa.
Los efectivos de tránsito avisaron a la Policía y los uniformados llegaron al lugar de los hechos donde tomaron rastros y testimonios. Luego los padres del joven descendieron de su hogar junto a su hijo y comentaron que les habían sacado las llaves de la camioneta, además revelaron que el joven sufría epilepsia. Un agente de policial le preguntó al chico si había ingerido alcohol y él respondió que sí.
La madre, por su parte, contó que el joven “llegó y se metió en la cama vestido”. Ella le preguntó qué había pasado porque lo vio raro. “No, nada”, le respondió. La mujer, le dijo “cómo que nada, está la Policía”. Y el responsable del accidente, concluyó: “Choqué”.
Se le realizó un test de alcoholemia y narcolemia. El fiscal López dispuso el traslado del responsable del choque a una dependencia policial y lo imputó por el delito de lesiones.