UNA REALIDAD EN NÚMEROS. Según una encuesta realizada por el Centro de Investigaciones Sociales (CIS) de la Universidad Argentina de la Empresa (Uade).
Los sentimientos de tristeza, preocupación, falta de energía y las dificultades para conciliar el sueño se triplicaron desde el inicio de la pandemia en comparación con el 2015.
El informe “Malestar, Preocupación y Estado de Ánimo Negativo”, se realizó sobre la base de 1.306 encuestas de personas desde los 16 años en adelante de todo el país.
La encuesta, de la que participó el centro Voices! de la Uade, reveló que sentirse muy preocupado resultó el aspecto más frecuente entre los considerados en todos los años, tendencia que se acentuó durante el actual relevamiento comparado a los años anteriores.
En 2015, el 19% de los argentinos había afirmado sentirse muy preocupado muchas veces, la mayoría del tiempo o todo el tiempo. Ese porcentaje se elevó al 40% de la población en el año 2020 y al 52% para el año 2021.
Mientras que en las mediciones del año 2020 el 17% de la población había manifestado sentimientos de soledad (sentirse muy solo) este índice se elevó al 24% en la encuesta del año 2021.
Por otra parte, mientras que al año 2015 el 8% de los argentinos expresaron haberse sentido triste, vacío o deprimido, tal porcentaje se triplicó al 24% para el año 2020 y alcanzó el 28% para el año 2021.
Según la encuesta los problemas para dormir también crecieron fuertemente en el contexto de pandemia ya que el 11% de los encuestados en el 2015 expresó tener algún tipo de dificultad para conciliar el sueño con alta frecuencia, pero ese porcentaje se incrementó al 38% en el año 2020, un aumento de 27 puntos porcentuales, manteniéndose en valores similares (39%) para el 2021.
En el 2015, el 13% de los argentinos manifestó sentirse irritable o de mal genio de forma frecuente, proporción que aumentó en 10 puntos porcentuales para el año 2020 (25%) y en otros 5 puntos más (30%) para el año 2021.
También aumentó la frecuencia de sentimientos como el desgano y la falta de energía ya que mientras que en el 2015 el 13% de la población había revelado sufrirlos tal porcentaje aumentó al 32% en el 2020 y al 34% para el presente año.
Fuente: Télam