El Gobierno alcanzó un nuevo acuerdo con el FMI por USD 20.000 millones que refuerza el plan de estabilización económica y marca un giro geopolítico clave. Con respaldo del Tesoro de EE.UU., el programa incluye metas fiscales, una nueva política monetaria y un régimen cambiario más flexible. El desafío: acumular reservas, contener la inflación y avanzar con reformas estructurales.
Como se preveía, el aumento de importaciones trajo la caída del superávit comercial. Esto hace que, aun cuando el campo liquide divisas, el Banco Central no acumule reservas. Más preocupante aún es que deja expuesto que la estabilidad cambiaria se está sosteniendo con dólares prestados. Por esto es que la negociación con el FMI pasó a ser el tema crucial.
Referentes de distintos partidos resaltaron la importancia del diálogo para avalar el proyecto.
El Gobierno alcanzó un nuevo acuerdo con el FMI por USD 20.000 millones que refuerza el plan de estabilización económica y marca un giro geopolítico clave. Con respaldo del Tesoro de EE.UU., el programa incluye metas fiscales, una nueva política monetaria y un régimen cambiario más flexible. El desafío: acumular reservas, contener la inflación y avanzar con reformas estructurales.
Como se preveía, el aumento de importaciones trajo la caída del superávit comercial. Esto hace que, aun cuando el campo liquide divisas, el Banco Central no acumule reservas. Más preocupante aún es que deja expuesto que la estabilidad cambiaria se está sosteniendo con dólares prestados. Por esto es que la negociación con el FMI pasó a ser el tema crucial.
Referentes de distintos partidos resaltaron la importancia del diálogo para avalar el proyecto.