Serán locales más pequeños, con menor cantidad de empleados, lo que significa una inversión inicial más baja y un costo de mantenimiento más acotado.
La cadena argentina Café Martínez lanzó un nuevo modelo de franquicias para su marca: se trata de una línea low cost, para garantizar que se sigan abriendo locales. El flamante formato contempla varios puntos que significan una inversión menor para mantener una franquicia, según consignó El Cronista.
En ese sentido, para abrir una sucursal tradicional se deben invertir 160 mil dólares. Sin embargo, para abrir una franquicia del nuevo formato denominado “Café Martínez A la Barra” se requiere de una erogación inicial de 80 mil dólares.
A su vez, los locales de la línea low cost tendrán entre 70 y 120 metros cuadrados y contarán con cuatro o cinco empleados, mientras que las sucursales tradicionales tienen ocho o 12 personas trabajando.
En tanto, cabe destacar que la inversión inicial menor y el inferior costo de mantenimiento que tienen las nuevas franquicias también se traducen a una ganancia más baja: un local grande factura, en promedio, 1,2 millón por mes; una sucursal “Café Martínez A la Barra” recaudará entre 600 y 800 mil pesos mensuales.