Impulso

El gran triunfo de Rosario Central ante Huachipato por 5 a 0 en la quinta fecha del Grupo A de la Copa Sudamericana. 

En ascenso constante, así está la moral de este Rosario Central que, desde el triunfo en el clásico, más allá de la eliminación por la Copa de la Liga Profesional, muestra que encontró el rumbo futbolístico para quedar a las puertas de la clasificación.

El Canalla goleó a Huachipato con goles de Gamba, Vecchio de penal, Gutiérrez en contra, Damián Martínez y Luca Martínez Dupuy.

Este jueves, 12 de Octubre recibe a San Lorenzo con la necesidad de golear para visitar al auriazul con chances.

UNA APLANADORA

Al minuto, un error entre Broun y Ávila le regalaron la posibilidad a Altamirano que encontró la pierna del defensor para salvar la caída del arco Canalla. Huachipato salió con una actitud distinta a la de Chile, más adelantado presionando la salida del equipo del Kily González al que le costaba acomodarse en el partido.

A los 16 minutos se juntaron por primera vez Zabala con Ruben, la pelota que le quedó al nueve quien remató bajo y encontró una buena respuesta de Castellón.

Empezaba a soltarse el Canalla y comenzaban a llegar las oportunidades.

A los 26 llegó la apertura del marcador, con una corajeada de Gamba quien le robó la pelota a Tapia y cuando salió el arquero definió al ángulo izquierdo.

El local encontraba espacios y Ferreyra era el más claro e inteligente; en una de esas, lo habilitó a Ruben que le reventó el pecho al arquero chileno, en esa jugada, tras un córner, Baeza lo tomó de la camiseta a Gamba, y el árbitro uruguayo marcó el punto del penal. Vecchio definió al ángulo derecho de Castellón para poner el 2 a 0.

Daba la sensación que cuando acelerara el equipo del Kily iba a hacer daño, y así fue cuando sobre el final de la primera etapa, Gamba lo vio llegar a Zabala que abrió para Martínez y en un centro traicionero encontró el pie de Gutiérrez que en contra puso el 3 a 0.

Pero iba a haber más, porque Huachipato estaba aturdido y Central no aflojaba.

Así llegó el cuarto, con la misma sociedad pero esta vez Zabala entró por el mismo sector y nuevamente en el centro encontró el pie de Martínez que punteó la pelota al primer palo, gran primer tiempo de Central.

SOBRÓ EL COMPLEMENTO

Los segundos cuarenta y cinco minutos estuvieron de más, Central reposó dándole la pelota a un inexpresivo y shockeado equipo chileno y esperando, en algún contragolpe, agrandar la goleada.

Diego “Pastilla” Ordoñez (reemplazó al Kily González expulsado frente a San Lorenzo) mandó a la cancha a Torrent y Marinelli por Martínez y Ferreyra ya pensando en la definición del grupo la próxima semana.

El propio Marinelli apenas ingresó, desperdicio dos contragolpes que podían haber sido la vuelta al gol del juvenil, pero malas decisiones a la hora de enfrentar al arquero mantenían los cuatro goles de diferencia.

El Kily desde el palco, siguió cuidando a sus hombres importantes por eso sacó a Ruben y Zabala para que ingresen Martínez Dupuy e Infantino.

Y a los 32 minutos, tras un centro de Vecchio, hubo un corto rechazo del defensor de Huachipato y Martínez Dupuy, con una cabriola se sacó la mufa de la expulsión en el partido de ida para poner el quinto.

El último cambio fue para cuidar al cerebro futbolístico del equipo Emiliano Vecchio, en su lugar ingresó Francesco Lo Celso.

Quedaba tiempo para que Broun muestre que sigue estando en un gran momento, a la par del equipo.

Con Gamba como figura, pero acompañado por compadres ofensivos que pasan un gran momento como Vecchio, Ruben, Ferreyra y el propio Zabala, Rosario Central se ilusiona con el pasaporte que da el grupo A, sostenido por un equipo que tiene una característica determinante, cree en sí mismo.