La caída ante Arabia Saudita caló hondo en el seno de la Selección Argentina ya que todo hacía suponer que el estreno en el Mundial sería con victoria.
Es por eso que después del partido entre México y Polonia, perteneciente al mismo grupo, hubo una reunión entre los jugadores -sin cuerpo técnico ni dirigentes- donde se arengaron de cara a lo que viene.
Tras la derrota en el debut mundialista hubo una charla de casi una hora, donde los futbolistas dijeron todo lo que tenían para decir. La conclusión de la charla fue unirse como grupo, trabajar y pasar la página rápidamente para ganar el próximo duelo y continuar con el sueño intacto.
Minutos después del encuentro ante el elenco saudita, Messi declaró: “Que la gente confíe. Es un golpe duro para todos, para la gente y nosotros que no esperábamos arrancar de esta manera, pero que la gente confíe que este grupo no los va a dejar tirados. Vamos a ir a buscar los dos partidos, dependemos de nosotros, sabemos que estamos obligados pero ya hemos jugado partidos de esta característica y vamos a ir a hacer pie”.
En tanto, Lionel Scaloni también acusó el golpe sufrido, y tras el entrenamiento matutino de este miércoles, tomó una drástica decisión. Determinó que durante el transcurso de esta tarde los jugadores puedan tener un encuentro con sus familias, ya instaladas en Qatar. Esto está relacionado con las intenciones que tiene el entrenador de que sus futbolistas despejen un rato la cabeza y se desconecten de la derrota que seguirá doliendo.