El oficialismo presentó un proyecto para que haya más presentaciones. ¿Quieren que hable Cristina?
Los legisladores de “Juntos por el Cambio” no se resignan a perder las elecciones en octubre y pretenden que también haya debates para los cargos de vicepresidente de la Nación.
A los debates del 13 y 20 de octubre, ahora también pretenden que los compañeros de fórmula expongan sus ideas.
Al igual que lo hiciera en la Cámara de Diputados el macrista Fernando Iglesias, la radical Silvia Elías de Pérez presentó en el Senado un proyecto de ley para que los candidatos a vicepresidente de la Nación también estén obligados a participar de un debate previo a las elecciones generales.
Para la senadora tucumana, es “importante dar un paso más y establecer también la obligatoriedad de los compañeros de fórmula, quienes además ocupan el primer lugar en la sucesión presidencial y, en muchos casos, quedan a cargo de los destinos del país por períodos cortos de tiempo, en los que el presidente debe viajar o tomar licencia,”.
También, la legisladora propuso que el debate de los candidatos a vicepresidente se deberá realizar en una localidad distinta a las dos seleccionadas para los debates de los postulantes a presidente.
La propuesta llega con escaso margen para que se trate en el Congreso y con menos tiempo aún para que se reglamente y ejecute en caso de aprobarse.
El texto modifica el artículo 64 del Código Nacional Electoral, de manera que quede redactado: “La Cámara Nacional Electoral dispondrá mecanismos similares a los establecidos en los artículos anteriores para la realización de un debate electoral entre los candidatos a vicepresidentes de las diversas fórmulas presidenciales, el que deberá llevarse a cabo en una localidad distinta a la determinada para el debate de candidatos a presidente”.
El proyecto establece las mismas penas para el candidato a vicepresidente que decida no presentarse al debate obligatorio que las que ley vigente fija para el postulante a presidente que no quiera participar.
La no concurrencia a un debate también implicará la pérdida de la publicidad audiovisual.
Imágenes: Gentileza