El municipio tiene como objetivo prioritario potenciar la nutrición proteica de la población rosarina en sectores de mayor vulnerabilidad y para ello se está ensayando un plan de liofilización
El intendente Pablo Javkin, junto al coordinador General de Gabinete, Rogelio Biazzi, recorrió este miércoles 5 de mayo la empresa WeCook, en el marco del proyecto de la Planta Piloto de Liofilización, vinculado a un objetivo prioritario del municipio como lo es mejorar la nutrición de la población rosarina en los sectores de mayor vulnerabilidad, garantizando el acceso a alimentos adecuados, seguros, locales, saludables y nutritivos.
En el contexto de la pandemia de Coronavirus, cuyo impacto más que triplicó la asistencia alimentaria durante el 2020, se desarrollan distintas estrategias que articulan lo público y lo privado para tener un alto impacto en materia alimentaria.
Para ello se está trabajando a través de tres ejes. El primero es la Red de recupero y producción de alimentos nutritivos, el segundo un Sistema de gestión que articule y flexibilice, y el tercero es la Sensibilización y formación para los beneficiarios y la ciudadanía en general. El proyecto de la Planta Piloto de Liofilización se enmarca en el primer eje de acción que es la Red de Recupero y Producción de Alimentos Nutritivos.
El trabajo conjunto del municipio junto a la empresa WeCook logró la factibilidad del proyecto de la Planta Piloto, donde se piensa en trabajar principalmente a base de proteínas: por ello se llevaron a cabo pruebas de liofilizado de distintos productos en un laboratorio de Buenos Aires.
Javkin señaló: “Estamos trabajando en un proyecto a fin de pensar la nutrición para ya no sólo garantizar alimentos sino también garantizar calidad y valor nutricional. En ese proyecto en conjunto con la Universidad Nacional de Rosario y el Banco de Alimentos que venimos desarrollando también con el equipo de Fixit (empresa de gestión de proyectos de impacto social), uno de los puntos es el tema de las proteínas, en este caso, poder tener un método en nuestras cajas de alimentos para, por ejemplo, incluir proteína animal. En ese sentido, uno de los procesos es liofilizar a través del trabajo de WeCook”.
Y agregó: “La pandemia nos ha hecho casi cuadruplicar los niveles de asistencia alimentaria. Eso nos da una experiencia asociativa, ya que trabajamos junto a la provincia, el Banco de Alimentos. Pero ya no es sólo asistir alimentariamente sino también con qué calidad lo hacemos y eso se nota en el sistema de salud pública. Por eso hay que trabajar en la calidad para lograr que menos personas tengan comorbilidades, porque la pandemia también ha mostrado eso. En ese sentido, tenemos confianza en este proyecto que puede ir escalando, pero hoy es la primera semilla”.
Sobre la liofilización
La liofilización es un proceso de conservación de los alimentos en el que se congela y se descongela el producto pasando por el vacío y a presión atmosférica baja. El resultado es un alimento similar al deshidratado, sin agua, que se puede conservar durante mucho tiempo.
Entre las ventajas se encuentran que mantiene mejor la estructura y el aspecto original del alimento, inhibe el deterioro del color y sabor por reacciones químicas y las pérdidas de propiedades fisiológicas, la retención de los aromas es muy alta, el tiempo de conservación es largo, casi ilimitado, y es aplicable a todo tipo de alimentos desde muy frágiles (frutillas, champiñones) y a carnes.
En este caso, se hicieron las pruebas en los siguientes cortes de carne: roast beef, jamón cuadrado, pechuga de pollo, paleta y cuadril de cordero.
Rosario adhiere al Pacto de Milán
El Pacto de Política Alimentaria Urbana de Milán es el primer protocolo internacional en materia alimentaria que se realiza a nivel municipal. La iniciativa comenzó en 2015 en coordinación con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. El Pacto reúne a más de doscientas ciudades y Rosario fue elegida como miembro del Comité Directivo en el período 2021-2023, y ya participó de la primera reunión del Comité Directivo.
El Pacto propone un Marco de Acción articulado en un conjunto de 37 medidas recomendadas, organizadas en torno a seis categorías: Gobernanza, Dietas sostenibles y nutrición, Equidad social y económica, Producción de alimentos (incluidos los vínculos urbano-rurales), Suministro y distribución de alimentos, y Desechos alimentarios.