El presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe manifestó su postura ante la posibilidad del aumento de retenciones al campo.
El presidente de la Cámara de Diputados y Diputadas de Santa Fe, Miguel Lifschitz, manifestó su rechazo ante la posibilidad de un nuevo aumento en las retenciones al campo, y pidió por “políticas y programas que apunten a potenciar el modelo exportador, con agregado de valor y de manera sustentable”.
“La solución no puede ser siempre aumentar la carga tributaria sobre el sector agropecuario como si fuera responsable del desmanejo económico de los sucesivos gobiernos, son viejas recetas que ya han demostrado no dar los resultados que se pretenden. Hay que producir mayor cantidad de alimentos, generar empleos y divisas, y una medida de este tipo lograría lo contrario”, sostuvo.
Lifschitz, que días atrás había manifestado su postura favorable a la eliminación de las retenciones a la lechería, manifestó que “los productores necesitan estímulos para afrontar un panorama muy complejo en lo macroeconómico”, y continuó: “Pareciera que ante la imposibilidad de encontrar soluciones más inteligentes, el gobierno nacional busca un enemigo al que responsabilizar por el aumento imparable de los precios. Estas decisiones generan incertidumbre y desconfianza y nos retrotraen a situaciones de conflicto que creíamos superadas. Sería un grave error y traería enormes perjuicios, principalmente en provincias como la nuestra”.
De igual modo, el exgobernador de Santa Fe recordó el conflicto con el campo de 2008, que tuvo una particular virulencia en la región centro y dejó secuelas que luego tardaron años en superarse. “Aumentar retenciones o poner cupos a la exportación son medidas que ya han demostrado no generar beneficios para el país, sino todo lo contrario. Se debe encontrar otra salida para frenar la inflación y buscar herramientas que, a su vez, no jaqueen al sector productivo”, añadió.
En tanto, el presidente de la Cámara baja provincial se refirió a los objetivos que deben plantearse para avanzar: “Se necesitan acuerdos y políticas claras para poner la economía en marcha de manera sustentable, agregando valor en todos los eslabones de las cadenas productivas. Tenemos que trabajar en conjunto desde la política con los sectores de la producción para lograr que la matriz productiva garantice el cuidado de los recursos naturales, potenciando a su vez un modelo exportador que amplíe la oferta de trabajo”.
“El campo juega un rol fundamental en este sentido -continuó Lifschitz-, tanto para el crecimiento de Santa Fe como del resto del país. El estado debe tener un papel claro para lograr esto, invirtiendo en la mejora de infraestructuras, rutas y caminos, promoviendo la investigación y el desarrollo tecnológico, y estableciendo un marco de estabilidad macroeconómica, poniendo especial énfasis en el apoyo a los pequeños y medianos productores”.
A la hora de brindar ideas y propuestas que ayuden a salir de este difícil momento, Lifschitz resaltó que “la discusión sobre una producción sustentable es ineludible y urgente”, y siguió: “Deben plantearse incentivos para desarrollar cultivos más respetuosos con el ambiente, planteando, por ejemplo, baja en las retenciones de acuerdo al tipo de cultivo, alentando la diversificación del suelo. Es necesario poner sobre la mesa discusiones en este sentido, abriendo nuestra economía con un modelo sostenible”.