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Los seguros para autos son obligatorios, pero también necesarios, sobre todo si se tienen en cuenta los distintos peligros a los que se exponen los conductores y sus acompañantes día a día.

Tener el vehículo asegurado significa una tranquilidad en muchos aspectos. Por un lado, cuida el bolsillo frente a cualquier imprevisto que pueda surgir, desde problemas técnicos hasta robos y accidentes. Por otro, protege al conductor y a los terceros involucrados, ya que les brinda asistencia vial cuando sea necesario.

Si bien pensamos que no es probable ser una víctima más de hechos delictivos o accidentes de tránsito, lamentablemente pueden ocurrir. Según datos de la Asociación Civil Luchemos por la Vida, durante 2019 murieron 18 personas por día en Argentina como consecuencia de los accidentes de tránsito. Por eso, es importante contar con una buena póliza, pero ¿qué hay que tener en cuenta para elegir los seguros para autos adecuados?

El seguro, una obligación civil

Antes que nada, es primordial saber que sin un seguro no se puede salir a la calle, por más corto que sea el trayecto. Así lo establece la Ley de Tránsito 24.449 y quien no la cumpla, se expone a distintas sanciones, desde multas hasta la inhabilitación para conducir. Los seguros para autos obligatorios son los de responsabilidad civil, más conocidos como “seguros contra terceros”, que cubren los daños físicos y materiales ocasionados a otras personas, transportadas o no, como consecuencia de un accidente de tránsito.

¿Qué ofrecen las distintas compañías?

Entonces, una vez hecha la inversión en un vehículo, lo primero que se debe hacer es buscar un plan de seguros que se adapte a nuestras necesidades. Para esto, es aconsejable hacer una revisión de las distintas compañías que existen y los servicios que ofrecen. Esto servirá para tener un pantallazo de los planes a los que se pueden acceder y sus costos.

Existen distintos tipos de seguros para autos. Hay servicios básicos y más completos. Además de los daños ocasionados a terceros, por lo general cubren frente a robos e incendios, de forma parcial y/o total y la destrucción total del vehículo.

Pedir referencias a familiares o conocidos puede ser una buena opción, para saber cómo actuó determinada empresa ante un siniestro, qué beneficios ofrece y cuáles son los tiempos que maneja, por ejemplo.

Pensar más allá de la obligación

Previo a contratar un seguro para el auto, es recomendable considerar todas las opciones y no quedarse con el servicio más básico. Si bien es fundamental ser responsables en la calle para evitar accidentes, hay veces en las que no depende de nosotros y por más cuidadosos que seamos, no estamos exentos de que nos pase algo. Los costos de reparación del auto pueden ser muy altos, sobre todos si se considera que en los últimos años los repuestos han sufrido un incremento de precios.

Algunos puntos que pueden ayudar a la hora de tomar una decisión:

-Tener en cuenta por dónde se circula habitualmente. No es lo mismo usar el vehículo de vez en cuando, que ir a trabajar todos los días con el mismo o utilizarlo como medio de trabajo. En los últimos casos, el seguro deberá ser más completo.

-Dónde se guarda. Como dice el dicho, es mejor prevenir, que curar. Si el auto se deja en la calle, será mejor que tenga un seguro contra todo riesgo, ya que está expuesto no solo a los robos e incendios, sino a las inclemencias del clima.

-La antigüedad del vehículo. Las compañías de seguros tienen en cuenta varios factores antes de asegurar un auto, como la suspensión, el motor, los frenos y la caja de cambios, entre otros.