La firma se convirtió en la única de su rubro a nivel mundial en obtener ese reconocimiento. Además, trabaja en la reducción del impacto ambiental mediante la gestión de residuos y se consolida como una fuente laboral para más de 500 familias. ¿Su clave? Innovación permanente.
El rubro de las demoliciones en Argentina tiene, desde hace algunos meses, una compañía que logró la certificación de Empresa B: Grupo Mitre. Se trata de una firma familiar, fundada hace 35 años, que a fuerza de innovación logró destacarse por su compromiso ambiental y su aporte social mediante la generación de empleos de calidad.
Grupo Mitre, además de ser una referencia en demoliciones, sumó servicios de obras de infraestructura y mejoró su capacidad operativa desde todo punto de vista. “Hoy somos una empresa líder y referente en cuanto a demoliciones. Lo logramos en base a mucha innovación, impulsada mediante la participación en congresos y ferias internacionales, sumado a una fuerte vocación de servicio. Somos la única empresa del país y una de las dos de Latinoamérica que participamos en un congreso internacional de demolición”, comentó uno de los gerentes de la compañía, Miguel Ippolito.
GRUPO MITRE, RECONOCIDO A NIVEL MUNDIAL EN MEDIOAMBIENTE
La firma no escatima en avances y crecimiento, y, lógicamente, ese trabajo tiene sus consecuencias positivas. “Hace 12 años que se hace este congreso internacional, en el que fuimos nominados en cinco ocasiones, en siete categorías distintas –destacó Ippolito-. Este año estuvimos ternados en tres categorías. En una de trabajo colaborativo, por una obra que desarrollamos en Mar del Plata con trabajadores de ese municipio, bomberos y personal de Defensa Civil. Gracias a esa obra fuimos reconocidos en la tapa de la revista de demoliciones más importante a nivel mundial”.
Además, el referente de la firma indicó: “Estuvimos también nominados por nuestro programa de entrenamiento y seguridad e higiene y por nuestro programa de gestión ambiental, categoría en la cual obtuvimos el máximo galardón, siendo la única empresa Latinoamericana en obtener el premio. En dicha categoría competimos conta DESPE, líder en Demolicion de Italia, y Costello, una importante empresa de Estados Unidos”.
Por otro lado, sobre los avances y el mejoramiento de la empresa, Ippolito detalló: “Empezamos a participar en estos congresos en 2013, y notamos en los primeros años que estábamos muy lejos de lo que se hace en otros lugares del mundo. Pero actualmente, por nuestro trabajo, innovación tecnológica y gestión de residuos, nos hemos acercado bastante a lo que exigen los estándares internacionales”.
GESTIÓN DE RESIDUOS: UN DIFERENCIAL ABSOLUTO
El compromiso con el medioambiente es una de las claves de la compañía líder del mercado de demoliciones. En ese sentido, Ippolito remarcó la importancia de la gestión de residuos y explicó: “Nuestra empresa gestiona aproximadamente el 90 por ciento de los residuos que genera. Aplicamos el modelo de economía circular e insertamos los residuos en nuestro circuito productivo. Reutilizamos el árido de construcción generado por nuestra operación y lo tratamos mediante un sistema de reciclado, que nos permite obtener un ecoarido apto para su uso en nuevas obras”.
“En paralelo, reciclamos las aberturas y las comercializamos en un corralón de materiales. Le damos una nueva vida a lo que sacamos de los sitios en los que desarrollamos las demoliciones”, amplió.
CERTIFICACIÓN DE EMPRESA B
En relación a uno de los avances más importantes en este año, el gerente de Grupo Mitre relató: “Vimos necesario el hecho de certificar nuestro trabajo. Entendimos que un certificado de aval pertinente nos daba el plus que necesitábamos, con lo cual tramitamos un certificado de Empresa B”.
“Las Empresas B están certificadas por una organización norteamericana llamada B Lab –precisó Ippolito-. El certificado da cuenta de que el trabajo de la empresas tiene además de un impacto económico, un impacto social y ambiental. En Argentina eso se conoce como el triple impacto”.
Además, agregó: “Obtuvimos la certificación en medio de la pandemia. Logramos ser la primera empresa de demoliciones el mundo en conseguir el certificado de Empresa B, algo que fue destacado en el congreso en el que participamos. Además, fuimos la primera empresa de construcción de Argentina en obtener esta certificación”.
IMPACTO AMBIENTAL Y HUELLA DE CARBONO
En la misma línea de compromiso medioambiental, Ippolito se refirió al trabajo extra de la empresa para adecuar su capacidad operativa a modalidades lo menos nocivas posible para el medioambiente.
“Descubrimos que en impacto ambiental somos pioneros en lo que es la medición de la huella de carbono, que refleja el impacto de la generación de carbono que se genera mediante las operaciones –profundizó el referente de la empresa- . En 2019 concretamos nuestra primera medición y en 2020 plasmamos un plan de reducción de nuestra huella, con lo que cambiamos desde las lámparas de la oficina hasta la forma de manejarnos con el uso de papeles, en línea con esto último incorporamos software para digitalizar el manejo de inventarios en obras de recursos”.
A su vez, Ippolito resaltó: “Empezamos un plan de compensación para lograr una carbono neutralidad, con lo que firmamos un compromiso de cara a 2030 para compensar el impacto que generamos con la plantación de árboles”.
Por otro lado, en torno a los cambios adoptados, añadió: “Incorporamos maquinaria de demolición eléctrica y también híbrida, para trabajar en la reducción de la huella. También otras herramientas diferenciales en el país. Nos esforzamos por conseguir objetivos y ser distintos”.
CAPACITACIÓN LABORAL
El aspecto social también es parte importante de la estructura de Grupo Mitre. En ese sentido, el referente de la firma indicó: “En el desarrollo de la certificación vimos que había un eje social que estábamos abarcando. El 65 por ciento de nuestra nómina de personal tiene barrera al empleo, es decir, no terminaron ni siquiera la primaria. Y gracias a las horas de capacitación que brinda la empresa logramos que esas personas aprendan un oficio. Quizá alguien que empezó a trabajar de joven con nosotros como colaborador, hoy es maquinista”.
“Actualmente tenemos una planta de 320 trabajadores. Pero si sumamos las cooperativas con las que intervenimos en los desarrollos de los barrios vulnerables podemos decir que somos una fuente laboral para más de 500 familias”, puntualizó.
CERTIFICACIÓN ISO 9001
En relación a otro de los hitos de este año, Ippolito relató: “Luego de un proceso de más de 20 meses de desarrollo logramos obtener en el mes de octubre del 2020 la certificación ISO 9001 de nuestra operación y administración, con la cual en complemento a la certificación de Empresa B antes mencionada podemos garantizar la calidad de los servicios que brindamos como compañía y la finalidad del triple impacto generado por la ejecución de los proyectos que llevamos adelante, garantizando en cada uno el mismo estándar de servicio”.
Finalmente, Ippolito comentó: “Tenemos capacidad operativa en todo el país. Trabajamos en varios procesos de demolición y urbanización en villas de la Ciudad de Buenos Aires. Allí incorporamos una línea de maquinaria de menor porte para poder acceder a los lugares de difícil acceso que caracteriza estas urbanizaciones vulnerables. También estamos trabajando en Rosario y en otras ciudades del interior, siempre en obras de envergadura”.