Por Impulso

En una tarde para el olvido, Central cayó por 4 a 1 ante Huracán en el Gigante y se quedó sin Sudamericana.

Rosario Central no estuvo a la altura de lo que debía ser una tarde de fiesta ante su gente y dejó pasar una chance inmejorable de quedarse con uno de los boletos a la Copa Sudamericana. Huracán fue mucho más y lo goleó 4 a 1, con dos tantos de Cóccaro, Candia y Pérez; Martínez Dupuy había puesto el transitorio descuento. Con este resultado, Racing y Unión lograron los dos últimos pasajes a la copa.

El partido empezó como una verdadera final, con los dos equipos yendo a buscar el triunfo. La primera clara la tuvo el Canalla, con un desborde de Vecchio por izquierda y un centro lo encontró a Infantino, que le ganó a su marca y reventó el palo derecho de Marcos Díaz. Mientras que en la jugada siguiente, Cabral enganchó y no dudó en rematar obligando a Romero a su primera tapada.

A los 13, un choque de cabeza entre Damián Martínez y Chávez obligó al defensor a salir del campo de juego conmocionado. A los 18, cuando el encuentro volvía a la normalidad, Cóccaro sorprendió con un remate de media distancia que se desvió en Almada y se le metió a Romero abajo para poner en ventaja al Globo.

El Canalla quedó bloqueado tras el gol de la visita, desaparecieron los volantes ofensivos y de creación, nunca encontró el camino para llegar al arco de enfrente. Llegando al final de la primera etapa, Galván de cabeza tras un tiro libre casi pone el 2 a 0. En tiempo adicional, Cóccaro intentó definir un contragolpe pero le pegó tan desviado que le quedó nuevamente a Candia, quien remató entre los defensores y venció a un Romero tapado para poner más ventaja para el equipo de Kudelka.

En la última de la primera etapa, un centro de Blanco al área, Ruben empujó a Galván para ganar la posición, Herrera no lo vio, el goleador auriazul cabeceó y encontró una enorme reacción de Díaz ayudado por el travesaño. Así se fue una primera parte con un local totalmente aturdido por la desventaja.

LA SEGUNDA MITAD

Para jugarse todo en el complemento, Diego Zabala y Luca Martínez Dupuy ingresaron por Lo Celso y Gamba. La llave ofensiva eterna en Central eran los centros de Blanco, que esta vez con un centro de derecha, se la puso en la cabeza a Martínez Dupuy, pero el disparo se fue por arriba del travesaño. Pero dos minutos más tarde, otra vez el lateral izquierdo le dio de zurda y esta vez el “Mexicano” no falló y puso el 1-2.

A los 18 el partido cambió, ya que Hezze le aplicó un golpe a Ávila y vio la roja. Cuando el Canalla tenía todo a favor para dar vuelta el partido, Cóccaro le ganó una pelota perdida a Almada, habilitó a Nuñez y el recién ingresado, con un centro a la cabeza del uruguayo que se había metido en el área, venció a Romero para poner 3 a 1 arriba al Quemero.

El Kily González fue a buscar lo único que necesitaba, goles, por eso mandó a Luciano Ferreyra y Alan Marinelli por Infantino y Martínez. El tercer gol del Globo fue decisivo para lo anímico en el encuentro. El último cambio fue la vuelta de Milton Caraglio para reemplazar a Almada, de flojísimo partido. A falta de un minuto para que se cumplan los noventa, una jugada individual de Nuñez le puso cifras definitivas a un partido para el olvido en el Canalla.

La decepción se hizo dueña de la tarde para los hinchas canallas. La chance copera se escapó; los del Kily González retrocedieron en rendimiento y cerraron el año dejando la peor imagen en todo el torneo, cerrando un campeonato que pasó a ser apenas regular y sin el desafío cumplido. La continuidad del técnico para 2022 y un futuro que deberá tener replanteos de todo tipo para no quedarse nuevamente a las puertas.

Tags: copa sudamericana Huracan Rosario Central



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