Los datos surgen de un estudio estadístico que precisó la incidencia del fenómeno en cada zona de la Argentina. ¿Cómo se relaciona este incremento con el cambio climático?
Un estudio estadístico de series temporales de días de tormenta en la Argentina demostró que en 50 años se dio un crecimiento de la frecuencia de este fenómeno meteorológico; así, en el Noreste se registra un aumento promedio de 22,5 días; en Cuyo de 11,5; en la región Central norte de 9,5; en la Central sur de 5,5; en el Noroeste de 2 y en la Patagonia de 1,5.
“Estudiamos series a largo plazo de días tormentas de 36 estaciones convencionales del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), en base a observaciones humanas y encontramos que 23 estaciones muestran un aumento significativo“, afirma la autora de la investigación, la licenciada en Ciencias de la Atmósfera, Fiorela Bertone, del Centro de Información Meteorológica del SMN.
“Luego -continúa Bertone- dividimos el país en regiones y vimos que todas mostraban tendencias hacia el aumento. En cada región se promediaron los datos de días de tormentas de las estaciones meteorológicas que estaban comprendidas en cada una de las regiones”.
La especialista añade que también hicieron “un análisis regional y estacional y todas las tendencias significativas identificadas en las distintas estaciones del año son positivas, aunque en verano y en primavera la tendencia al aumento es mayor”.
De acuerdo a las áreas divididas para el estudio, el Noroeste está comprendido por Jujuy, Tucumán, Catamarca y gran parte de Salta y de Santiago del Estero, mientras que la región Noreste incluye el oriente de ambas provincias, además de Formosa, Chaco, Misiones y el norte correntino.
En tanto, en la región de Cuyo se tomó el oeste de La Rioja, además de las provincias de San Juan, Mendoza y Neuquén. El Centro norte abarca el sur de Catamarca y de Santiago del Estero como así también La Rioja, Santa Fe, Corrientes, Entre Ríos, Córdoba, San Luis, este de San Juan y Mendoza y norte de La Pampa y de Buenos Aires, mientras que el Centro sur está formado por estas dos últimas y el norte de Río Negro.
Finalmente, Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut y el sur del Río Negro integran la región de Patagonia.
TORMENTAS , CAMBIO CLIMÁTICO Y RIESGOS
Las tormentas se caracterizan por la actividad eléctrica con la posibilidad de estar acompañadas por otros fenómenos como precipitaciones intensas que provoquen inundaciones, granizo, ráfagas fuertes de viento e incluso tornados.
“Pueden ser un riesgo para la vida de las personas, y generar daños en infraestructura como en las líneas de transmisión de electricidad. Por eso es importante ver la distribución de las tormentas en nuestro país y ver qué regiones están más expuestas a este tipo de fenómenos”, indica el responsable del Grupo de Aplicaciones de Sensores Remotos del SMN, Luciano Vidal y uno de los directores de la tesis de Bertone.
Además de los daños que puede causar una tormenta con granizo, la investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y del Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas para la Defensa (Citedef), Gabriela Nicora, suma los incendios.
“Uno de los efectos del cambio climático es el aumento de los eventos extremos como las sequías. No es lo mismo tener una descarga eléctrica en un lugar que está húmedo que en uno con mucho material seco, muy combustible con el riesgo de originar incendios“, explica Nicora, quien es geofísica y directora del trabajo de investigación.
“En regiones como Cuyo en donde la sequía es cada vez mayor, una descarga, aunque no sea muy energética, puede generar quemazones de pastizales“, agrega.
En base a distintas investigaciones, Nicora asegura que la Argentina forma parte de “una de las regiones del mundo donde hay más actividad eléctrica, en especial en la Mesopotamia, el Centro y en el Noroeste. La mayoría de los argentinos estamos habituados a las tormentas eléctricas, no es un fenómeno raro, excepto en el sur“.
Télam