Raúl Gramajo podría ser denunciado penalmente por el Ministerio Público de la Acusación tras conocerse que el legislador le mintió a un juez federal.
El senador provincial Raúl Gramajo podría ser denunciado penalmente por el Ministerio Público de la Acusación tras conocerse que el legislador le mintió a un juez federal para perjudicar al fiscal Matías Edery, con el objetivo de ayudar a su compañero de bancada, Armando Traferri. El delito en el que podría encuadrarse la conducta del legislador que hace 27 años ingresó a la Cámara Alta representando al Departamento 9 de Julio es el de abuso de poder.
Cabe recordar que el pasado 2 de junio, el senador Gramajo envió al Juzgado Federal N°3 una nota con membrete de la Cámara de Senadores de la Provincia pidiendo copia autenticada de una declaración reservada que había realizado en dicho Tribunal un imputado por el delito de narcotráfico de la zona de San Lorenzo.
La mencionada declaración se había dado el 3 agosto de 2021, ante la Justicia Federal. Y aquí aparece la primera irregularidad, ya que se trataba de una indagatoria reservada. ¿Cómo conocía Gramajo su existencia? Según el documento que elevó al juez Vera Barros, se había enterado por los medios. Es que en abril de este año, una parte de lo dicho por el narcotraficante de San Lorenzo se había filtrado en una nota de un portal web de noticias, que llamativamente salió publicada sin firma.
En esa indagatoria, el acusado había pretendido demostrar que el fiscal Edery le había ofrecido ser informante de la justicia. Pero según pudo reconstruir Red Boing, a esa denuncia la toma el fiscal federal Claudio Kishimoto y constata que los datos no tenían sustento, ya que todas las actuaciones de Edery en esa causa contra “Willy” Velázquez habían estado debidamente notificadas ante sus superiores en el MPA. Y entonces el juez decide entonces desestimar la denuncia del narco imputado.
“Es muy frecuente que pase eso en el marco de una causa judicial, que algún acusado cuando se ve arrinconado intenta embarrar la cancha con denuncias sin evidencia alguna, como tirando del mantel. En este caso, el tema quedó archivado rápidamente porque no había nada”, le explicó esta semana a Red Boing una fuente irrefutable de los Tribunales de Boulevard Oroño.
¿Casualidades?
Lo raro fue que ocho meses después de aquella declaración que ya estaba archivada por la Justicia Federal, el tema aparece publicado -pero a medias, porque no decía que la cuestión ya había sido desestimada por el juez- en un medio digital de Rosario. Llamativamente, esto pasaba al mismo tiempo que Traferri atacaba en la Legislatura a los fiscales que habían encontrado evidencias de su relación con el juego ilegal en la provincia.
En la sesión del 20 de abril, apenas trece días después de publicada aquella nota sin firma contra Edery, el senador Armando Traferri hizo una puesta en escena en la Cámara Alta. Proyectó un Power Point de 19 carillas, que acompañó con una carpeta que dejó sobre el escritorio de cada senador antes del inicio de esa sesión.
Ese cuadernillo recorría en una línea de tiempo lo que según él eran las pruebas de una persecución en su contra y la explicación de por qué debía seguir amparado en sus fueros y no presentarse ante la justicia, tal como venían solicitando Edery y Schiappa Pietra, que han manifestado tener pruebas de la vinculación de Traferri con actores del juego ilegal de la provincia.
Y la última hoja de esa hoja de ruta que mostró Traferri tenía -vaya casualidad- una parte de la misma denuncia que se había conocido en la publicación digital unos días antes. Aquella declaración indagatoria que en forma reservada había hecho un narcotraficante de San Lorenzo ante la justicia, que el propio juez ya había archivado, a solicitud del fiscal federal que había investigado su asidero.
Ese día, Traferri solicitó que lo presentado sea remitido a la Comisión de Acuerdos, que preside su socio político Raúl Gramajo.
La respuesta a Gramajo
“Nosotros respondimos al escrito de Gramajo enviando esa indagatoria. Se la mandamos en un sobre cerrado a nombre de él, como información confidencial. Él aludía a un proceso disciplinario que supuestamente se había abierto contra el fiscal Edery en la Legislatura y hablaba en nombre del cuerpo legislativo. Confiamos en esa explicación”, amplía la misma fuente de la justicia federal.
El “procedimiento disciplinario” del que hablaba Gramajo, no existía. Y cuando la semana pasada la Comisión de Acuerdos de la Legislatura que él preside trató la denuncia de Traferri contra Schiappa Pietra y Edery, la misma fue archivada por 6 votos a 2 (el propio Gramajo y Rubén Pirola, ambos compañeros del senador sanlorencino, fueron los que votaron contra los fiscales).
En declaraciones radiales sobre este tema, Schiappa Pietra dijo: “Lo que hizo Gramajo ronda lo inédito. Estamos analizando si hacemos una denuncia penal, porque invocando un procedimiento disciplinario que no había. No deja de llamar la atención el nivel de intetrevención de un legislador vinculado al senador Traferri, que lo único que parece importarle es interferir en el trabajo de los fiscales”.
El fiscal dijo luego: “Realmente debiéramos preocuparnos mucho, porque la función de un senador es legislar. Y si Gramajo dedica su tiempo a esto, que es intervenir desde un poder del Estado a otro, me parece que es un dato insoslayable. El contexto -recordemos- es el de la petición que hicimos, con evidencias, de que un legislador muy cercano a él, se siente ante la justicia a rendir cuentas”.