Para la eliminación del mosquito que transmite la enfermedad se recomienda no descuidar las medidas de prevención, descacharrar recipientes con agua y usar repelente.
La Secretaría de Salud Pública de Rosario, mediante datos obtenidos por el Sistema Municipal de Epidemiología, informó que desde el inicio del corriente año al 18 de abril, se notificaron 853 casos con síndrome febril con sospecha de dengue.
De esa cifra se confirmaron en la ciudad 536 casos autóctonos y 30 importados, otros 158 casos están en estudio, que 126 de ellos ya fueron descartados y hay 3 probables.
Ante esta situación, desde la Municipalidad piden a la población no descuidar las medidas para prevenir el dengue ya que se registra un importante aumento de los casos.
Las autoridades sanitarias locales confirmaron la segunda víctima fatal en Rosario causada por la enfermedad que transmite el mosquito Aedes aegypti. Se trata de una mujer de 60 años.
Es importante recordar que frente a síntomas como fiebre, acompañada de dolor detrás de los ojos, dolor de cabeza, muscular y de articulaciones, hay que colocarse repelente, consultar al médico y no automedicarse.
Por su parte, Analía Chumpitaz, directora de Epidemiología Municipal manifestó que “actualmente en la ciudad de Rosario hay circulación viral de dos serotipos, DENV-1 y DENV-4, estos serotipos conviven en casi toda la ciudad pero nos preocupa la situación en algunas zonas del noroeste y oeste. Es por esto que todas las vecinos y vecinas deben utilizar repelente durante el periodo que falta hasta que llegue el frio. Además, el descacharrado es fundamental en las viviendas y en el caso de tener síntomas, no automedicarse, usar paracetamol como antitérmico, mantenerse hidratado y ante dolor abdominal intenso o sangrado de encías o epistaxis (sangrado por la nariz) consultar de manera urgente”.
Cabe remarcar que la Municipalidad de Rosario fortaleció las acciones que lleva adelante en toda la ciudad para erradicar el mosquito Aedes aegypti que transmite diversas enfermedades como dengue, zika y chikungunya.
Las estrategias se basan en la intensificación de fumigaciones locales y campañas de autocuidado familiar con fuerte eje en el descacharrado domiciliario, la fumigación domiciliaria y el uso de repelente de todos los integrantes de los domicilios. La fumigación elimina al mosquito adulto, pero no a larvas y huevos, por esto el descacharrado es fundamental.
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