El nuevo esquema busca, entre otras cosas, sustituir importaciones y generar ahorro fiscal.
El nuevo Plan de Promoción de la Producción de Gas Argentino que ordenará un nuevo esquema de oferta y demanda de gas natural por los próximos cuatro años, en principio posibilitará sustituir importaciones por unos US$ 5.629 millones y a la vez generará un ahorro fiscal de US$ 1.172 millones hasta 2023.
El nuevo esquema que presentaron el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía Martín Guzmán, desde la formación neuquina de Vaca Muerta, también estima un incremento en la recaudación de US$ 2.525 millones, con participación equitativa de todas las regiones productoras.
La inversión de las empresas productoras prevista a lo largo del programa será equivalente a US$ 5.000 millones y el incremento de la recaudación fiscal a nivel nacional, provincial y municipal será de US$ 2.525 millones, según lo informado por fuentes gubernamentales.
DETALLES DEL PLAN
El plan, surgido en base al diálogo con empresas petroleras y provincias productoras, plantea contar con una “previsibilidad de precio y plazo contractual a los productores, normalizando un mercado de gas que en los últimos años presentaba severas distorsiones“, señalaron las fuentes.
De esta manera se busca satisfacer en forma eficiente la demanda de todos los segmentos de consumo, es decir el residencial, el industria y el de las generadoras de electricidad, ante una tendencia decreciente de la producción.
Así, la propuesta permitirá sustituir importaciones de Gas Natural Licuado (GNL) y el consumo de combustibles líquidos, y generará certidumbre de largo plazo en los sectores de producción y distribución.
Contribuirá también con el equilibrio de la balanza energética superavitaria a los objetivos fiscales del Gobierno, aseguraron las fuentes.
Además, se prevé que el nuevo esquema permitirá armonizar la situación entre el precio necesario que fomenta inversiones con la tarifa que puede afrontar el usuario residencial.
En base a la presentación oficial del plan, el programa incentivará la inversión y la producción de gas, para satisfacer la demanda interna y el gobierno confía que el incentivo a las empresas petroleras permitirá generar miles de puestos de trabajo directo para operar nuevos equipos de perforación y sets de fractura.
De esa manera, a priori se potenciará la generación de empleo y el desarrollo en las regiones productoras, tanto de sus Pymes y empresas regionales como del resto de la industria y la tecnología nacional.
Con el nuevo esquema el costo fiscal total será de US$ 5.062 millones para el período 2021/2024, lo que generará un ahorro fiscal total de US$ 2.574 millones.
Télam