El debate tuvo lugar en la comisión de Presupuesto y Hacienda del Concejo Municipal, que apunta a realizar un tratamiento conjunto de los tres expedientes que persiguen la misma finalidad.
La comisión de Presupuesto y Hacienda del Concejo Municipal de Rosario analizó cobrar impuestos a las viviendas ociosas en Rosario. Lo hizo mediante una reunión virtual en la que los ediles dialogaron sobre tres propuestas que apuntan a un mismo fin.
La reunión fue presidida por su titular, la concejala Lorena Carbajal, del bloque Socialista. Además, participaron su par de bancada, Mónica Ferrero; Aldo Pedro Poy, del Partido Demócrata Progresista; Andrés Giménez, de Unidad Ciudadana; María Luz Olazagoitía, de Ciudad Futura-FSP; Germana Figueroa Casas, de Juntos por el Cambio, y Fabrizio Fiatti, de Creo.
PROPUESTAS DE GRAVAMEN A VIVIENDAS OCIOSAS
En el primer tramo del encuentro, la concejala Carbajal comenzó dando lectura al temario y reunió a tres expedientes que solicitan gravar a las viviendas ociosas.
Se trata de una iniciativa de la concejala María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, que establece una contribución adicional sobre la Tasa General de Inmuebles (TGI). Otro proyecto autoría de la presidenta del cuerpo, María Eugenia Schmuck, que prevé un incremento diferencial también en la TGI y crea un fondo solidario para vivienda.
Y una tercera propuesta del edil Eduardo Toniolli, del Frente de Todos- PJ, que busca implementar un registro municipal de viviendas ociosas y una tasa para las mismas.
ALTERNATIVAS Y PLANTEOS
Carbajal resumió respecto a estos proyectos, indicando que tratan sobre la implementación de un registro voluntario, detección de consumo y explicó también que cuentan con distinta modalidades planteadas como ser contribución y aumentos de la tasa general de inmuebles. Por su parte, sugirió evaluar la aplicabilidad de los mismos para dar respuestas a sus autores.
Sobre las propuestas, Olazagoitía comentó que desde su espacio hicieron una iniciativa en la Legislatura provincial, por entender que la TGI es una contraprestación. Sin embargo aclaró que en la tasa de baldíos hay un diferencial lo cual permite pensar en cierta posibilidad de aplicación. “Estamos abierto a consensuar algún tipo de despacho”, sostuvo.
Por su parte, Figueroa Casas cuestionó la iniciativa respecto a analizar los efectos económicos que puede tener en la actividad de la construcción el gravar a las viviendas ociosas, por el tema de cuando están en venta y se demora la misma.
También para aquellos departamentos donde viven estudiantes, que por no estar cursando en la ciudad o por no pasar tiempo en ellos, caen sus parámetros de consumo de servicios. “Incluso hay gente que lo tiene en alquiler y no logra encontrar inquilinos. Es un tema delicado que merece un estudio profundo”, alertó.
En el mismo sentido, Ferrero coincidió en ponerlos en estudio, sobre todo por el contexto actual y analizar la posibilidad de implementación. A su vez, Carbajal retomó la palabra y propuso hacerle un tratamiento de manera conjunta por tratarse de tres expedientes que persiguen objetivos similares.