Franco Escobar, el lateral de Newell's, habló de lo mal que la pasó tras las lesiones y su deseo de seguir en el club.
Seguramente, en la fiesta de fin de año, Franco Escobar levantará su copa y brindará para que el 2022 no tenga nada de parecido al 2021.
La fractura del metatarsiano y el edema posterior, le hicieron vivir momentos difíciles: “Siempre tengo ganas de jugar acá, soy feliz y decidí venir. Las lesiones me hicieron un año muy complicado, donde no lo pase bien en lo personal, fuera de estar en el club, en mi vida privada, me costó mucho los primeros meses de las dos lesiones”.
Y agregó, valorando a los que estuvieron en ese momento, “tuve gente que me ayudó muchísimo en salir adelante, mis compañeros, dependerá de Newell´s y de Atlanta United mi futuro, ahora estoy concentradísimo en jugar lo que queda del torneo y después de diciembre se verá, se juntarán las dirigencias, mi representante y verán que es lo mejor, si llega una chance, acá soy feliz”.
Analizando la igualdad ante Boca expresó: “Hicimos un partido bastante correcto desde lo táctico en lo defensivo, tuvimos las chances para ganarlo, no la supimos aprovechar y obviamente con esa gran cantidad de buenos jugadores que tiene Boca se nos vinieron y supimos aguantar sacando un buen punto”.
“Obviamente es complicado con el ingreso de jugadores como Cardona y Villa que son de selección, muy rápidos, con mucha técnica, jerarquía, pero más allá de eso supimos aguantarlo, muchas veces nos fuimos de esta cancha sin ningún punto, creo que fue un empate donde ellos tuvieron un par de remates en los palos pero nosotros también tuvimos nuestras situaciones y nos llevamos un empate valioso” indicó ante las complicaciones en la segunda etapa.
El lateral definió en LT8 como está desde lo físico tras la vuelta a la titularidad: “Siento un poco la falta de ritmo tras jugar noventa minutos después de tanto tiempo, pero con la confianza de mis compañeros y del técnico te saca ese plus que por la falta de ritmo que sentía en los últimos diez minutos. Además la patada que llegó y me contracturó un poco, obviamente se siente pero le voy agarrando la mano con los minutos que voy a sumando más los entrenamientos”.
Finalizando la charla, contó la patada y marca que le propinó Almendra y que debió haber sido expulsión: “Me llevo un souvenir, lo veo cuando llego antes encojo el pie y veo que se tira con las dos piernas para adelante. Sinceramente pensé que lo iba a echar, pero estábamos y sabemos que esas cosas pasan de largo, si la patada la pegaba yo me iba, pero ya está, por lo menos me traje un punto, imaginate si me comía este patadón y encima perdíamos”.
Imágenes: Gentileza NOB